viernes, 24 de abril de 2009

De vuelta al otro hogar


Si, amigos: ya estoy aquí, en la ciudad cuyos atardeceres se asemejan a los de Luxor. Vengo con poemas nuevos y sentimientos antiguos. En esta corta estancia por tierras del Sur he tenido tiempo para mucho: he leído varios libros, he compartido muchas charlas, he visto todos los crepúsculos y....no he tenido conexión telefónica.
Puede que por ésto último algunos piensen que me haya asilvestrado algo, porque en la vida actual, si no tienes teléfono,internet,periódicos y coche, no eres nadie.
Yo, tal vez porque sabía que iba a estar de nuevo con vosotros, no me he sentido ni frustrada ni impedida; libre, muy libre y muy conectada, pero con la Naturaleza, a la que tanto amo.
Tras este lapso temporal he venido "rejuvenecida"; el mar, las olas, el viento, las horas de meditación y sosiego y los amigos de antaño han obrado milagros que ni siquiera la cirugía pudiera soñar.
Avete,amici!

5 comentarios:

  1. Bienvenida Amalia, ya veo que has conseguido entrar. Me alegro que te haya ido tan bien y te encuentres rejuvenecida, ya nos recomentdarás esas lecturas y nos leerás esos nuevos poemas plenos de mar.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  2. La foto no es ahí donde debías colocarla sino en tu perfil, pero bueno lo puedes corregir cuando quieras.

    Yo también tengo una buena noticia y es que está a punto de salir mi nuevo libro, si pasas por mi blog podrás ver la cubierta provisional.

    Hasta pronto.

    Ricardo

    ResponderEliminar
  3. Bien reencontrado,Ricardo: no,esta vez no me he equivocado al poner la foto. La he puesto ahí adrede, ya que así notáis la energía y la vitalidad que recupero cuando me acerco al agua; es tal, que rejuvenezco como veis.
    Ya sabes que creo en el sentido del humor y que soy amiga de este tipo de bromas, aunque tal vez mis expresiones no sean captadas como yo pienso.
    De todas formas sé que me ayudas y que sigues mis balbuceos blogosféricos. Gracias, Ricardo.

    ResponderEliminar
  4. Qué maravilla de muñequito. Una obra maestra de artesanía.

    ResponderEliminar
  5. Gracias, Ángel por llamarme maravilla; claro que la artesanía, la mayoría de las veces, necesita cierta restauración con el paso de los años, pero no importa: la supuesta belleza externa que va difuminándose, puede trastocarse en otra más interior y válida. Al menos eso espero conseguir. Gracias por seguirme. Un abrazo.

    ResponderEliminar