miércoles, 20 de mayo de 2009

Carta de Ida


Hola: me llamo Ida, tengo 47 millones de años y soy parte de tu eslabón perdido.
Mido 53 centímetros de altura, tengo mis manitas parecidas a las tuyas, soy una especie de lémur-mono y mi esqueleto fosilizado fue encontrado en el año 1983 en Messel Pit,una especie de cráter volcánico, cerca de Frankfurt (Alemania),pero el arqueólogo aficionado que me encontró no me supo valorar, así que me llevaron a Noruega y durante los últimos dos años, me han estado estudiando en el más riguroso de los secretos para poder presentarme en sociedad en el Museo de Historia natural de Nueva York.
Mi esqueleto fosilizado lo podréis conocer, pero sólo durante un día, en el Museo de Historia natural de Londres, antes de regresar a Oslo.

Post data: Me comentan que,teniendo en cuenta como marcha el mundo, no merece demasiado la pena ser considerado un humano.
Estaremos en contacto.
Tu antecesor, Ida.

6 comentarios:

  1. Vaya, Amalia, has cogido con gusto esto del blog, estás prolífica. Así, como tú eres, si merece la pena ser. Leí tu post anterior, contundente, desde luego, como todos te comentan.
    Me alegro de que tu blog te sirva y nos sirva.
    Un beso muy fuerte

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  2. Hola, Carmen: todas las personas, y más las que hacen bien, merecen la pena.
    Los que saben, dicen que no hay nadie superior a otro, sino que es más el que más hace y todos tenemos claroscuros; yo creo que se refieren a la positividad y al amor hacia los demás, pero antes tenemos que tener amor "propio" porque si carecemos de algo, mal podemos ofrecerlo a los demás.
    No es tu caso. Eres una mujer sensible,con corazón de poeta y tienes a tu lado personas muy generosas que te quieren y necesitan de tu valía y de tu entrega. No les desoigas.
    Te repito como aquel antiguo programa de la tele: "nena, tú vales mucho". Un beso.

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  3. Hola: Soy Rodrigo y estoy aquí desde anteayer. Antes de llegar, de donde vengo, hablé con Ida y me dijo que ella ya cumplió su misión en su momento, que, a pesar de todo, el mundo no es peor que cuando ella lo conoció y que ahora me toca a mí, y a otros que también estaban conmigo esperando a nacer, cumplir con la obligación de mejorarlo. Llevo poco tiempo, pero creo que lo podemos hacer.
    Esto se lo cuento a mi abuelo porque yo no se escribir todavía.

    transcripción: Jorge Amar

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  4. Pues yo no me acabo de creer que esta lagartija sea mi tatarabuela... Qué le vamos a hacer...
    Si es un bárbaro quien no se cree algo así, entonces se me ocurre que quizás los primitivos humanos (tan bárbaros ellos como yo) que se sentían descendientes de dioses debían de tener un mejor concepto de sí mismos. ¿Por algo sería?

    Bravo por el blog, Amalia, cada día mejor...

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  5. Hola, guapos: acabo de regresar de Bilbo (el Bilbao de siempre), a dónde he ido a una Competición de baile deportivo; ya sabéis que soy aprendiz de mucho y maestro de nada.
    Hemos conseguido un 2º y 5º puestos. Estamos muy contentos de haber “hecho finales”, y además de éste subidón de autoestima, el fin de semana nos ha servido para ver a amigos competidores con los que hemos compartido txiquitos y pintxos.
    Bilbao y sus alrededores estaban preciosos.
    Ya de vuelta, los trofeos quiero dedicároslos a vosotros, por seguirme, animarme e ilustrar este modesto y reciente blog con vuestras cariñosas palabras.
    Así que lo dicho: agradecimientos, ofrenda y muchos cariñitos de vuestra bloguera.

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  6. Enhorabuena Amalia por esos premios y por tu blog que va viento en popa, con el miedo que te daba cuando empezaste...

    Lo de este bichito no es cuestión de fe, es cuestión de genes si la ciencia dice que éste puede ser el eslabón perdido por algo será, al fin y al cabo a las especies fueron creados por los dioses y todos provenimos de un tronco común mas o o menos desarrollado.

    Un beso.

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